“La televisión es la forma más directa de emitir un mensaje»

Ricardo Burgos Rojas es jefe del buró de Corresponsalía  de Noticieros Televisa- México en Perú. Fue reportero y director de noticias de América TV del 1972 al 1980 y gerente de Prensa y conductor de “Mesa Central” entre 2007 y 2009 para el canal del estado. Lleva 24 años en Televisa como corresponsal itinerante de América del Sur.

A pocos días de las elecciones municipales y regionales, ¿cómo evalúa la cobertura informativa que realizan los medios de comunicación sobre ese proceso electoral?

Las elecciones municipales han venido de menos a más. Por la proximidad del proceso electoral, todos los medios insertan en sus ediciones gran cantidad de información sobre el tema. El elector limeño está informado acerca de los planes de gobiernos, de la guerra sucia, de la frivolización de la campaña y también de las actividades proselitistas de todos los candidatos.

Las elecciones se han polarizado, lo que ha facilitado a los medios el poder disertar noticias que interesen a los electores y a su público lector sobre estas dos señoras (Lourdes Flores y Susana Villarán).

¿A la luz de los resultados de los comicios municipales y regionales pasados, los medios  de comunicación mantienen sus criterios para informar sobre esta nueva justa electoral o han innovado su estrategia informativa?

Hay un cambio de actitud en los medios, pues la campaña es completamente distinta. En la anterior Castañeda estuvo prácticamente solo. Además, por la proximidad de un proceso electoral nacional, los analistas consideran que la guerra sucia de esta campaña electoral es apenas un preludio de lo que seria la cobertura nacional cuando hay mas cosas en juego. Están Ollanta Humala, Keiko Fujimori, Toledo.

Si todo esto pasa con dos señoras que son lideres de sus tiendas políticas, y son calificadas como honestas, va a ser mucho más problemático en las elecciones nacionales. Este caso es como un globo de ensayo.

Siempre se cuestiona que no se tome una actitud más cívica, pero los medios dependen de la lectoría y si en sus titulares y sus portadas no tienen información que atraiga al lector, nadie lo va a comprar. Por lo tanto, hay una guerra de titulares en los medios que forma parte de la frivolización de la política, pues a la gente no le interesa la política seria. Entonces, las empresas no toman una actitud más cívica porque son empresas privadas y tienen un fin lucrativo.

¿Podría decir si alguno de los medios en especial está jugando un papel más relevante que otros en llegar al público?

La televisión destaca en cada proceso electoral por su dimensionalidad y alcance. Los periódicos van definiendo líneas electorales y conductas ciudadanas, pero la televisión es más importante.

Por ejemplo, Lourdes Flores decae en la intención de voto por los audios, pero luego levanta por los errores de su contendora tanto por los asuntos de los hospitales como por los impuestos a los autos antiguos.

Entonces, otros medios están a la expectativa, pero la televisión es la forma y el procedimiento para que la gente se entere mas rápidamente, por ser el mayor medio de comunicación de masas.

Por esto, es una oportunidad para que los candidatos se escapen de la coyuntura y exponen sus planes de gobierno, pero la gente cambiaría de canal si esto se convierte en una exposición oratoria cansina, a menos que se le explique de manera adecuada.

La televisión es la forma más directa de emitir un mensaje. Hay un dicho: “si no sales en televisión, no existes”.

¿Se destaca más los planes y programas de los candidatos o aquello que es circunstancial, como los insultos o la llamada “guerra sucia”?

La banalización es lo que más sale a flote. Sucede porque los editores buscan vender periódicos, elevar el rating y que sus programas sean los primeros que motiven el encuentro de los puntos de vista de los personajes. Sin duda, lo circunstancial es lo que va a primar en un proceso electoral.

¿Está usted satisfecho como elector con la información que recibe diariamente sobre este proceso eleccionario?

Es como una autocrítica. Nosotros hemos enviado a nuestro noticiero informaciones sobre las infiltraciones de Sendero Luminoso o el narcotráfico en las candidaturas municipales, o el espionaje telefónico que perturba el proceso.

Este tipo de información también tiene consumo en el exterior. Son temas macros, pero acá es mas coyuntural y ligado al espectáculo. Jaime Bayly insultando a Tongo causa más que todo entretenimiento en los televidentes, y a eso se va llevando la campaña electoral.

¿Y en el caso de los diarios “serios”?

Los diarios serios no escapan del rigor de la venta de periódicos, solo que tienen otra forma de presentar sus titulares. La declaración de Kuczynski sobre el pánico financiero fue desmentida al día siguiente y fue información que provino de la prensa seria.

Estos diarios también tienen líneas editoriales que definen cual es la ruta que quieren que tome el elector. En base a los intereses de estos grandes medios también se define su universo de lectoría y se crea opinión.

¿Tiene alguna sugerencia para mejorar esto?

En otros países, como Colombia, se estila mucho tener al defensor del lector, una persona pagada por el periódico pero independiente, obligada por la ley, que representa a todos los lectores hipotéticos.

Este defensor lee el periódico y si ve que hay algo que atenta contra lo ético o lo moral, él mismo escribe y asume la defensa del lector. Acá, si te difaman, es la carta notificatoria del lector, que solo es publicada con suerte.

En la televisión podrían funcionar de mejor manera las franjas electorales, porque, en lugar de exponer los planes de gobierno, se utilizan para poner propaganda política. Así se pierde la excelente ocasión de brindar mensajes a la ciudadanía.

¿ Tiene algo más que agregar respecto a las elecciones?

Las elecciones generan controversia en todas partes. En Colombia ocurrió algo muy sui géneris. Mockus, que había cumplido con gran éxito en el proceso electoral, perdió ante el voto escondido que apoyó a Santos.

También allí hubo una guerra sucia impresionante entre Mockus y los seguidores de Santos, igual en Chile con Piñera. No somos una isla, en todas partes ocurre lo mismo, es parte de la idiosincrasia latinoamericana.

Entrevista y cámara: Christian Rivera